calixto

la academia de las artes y ciencias cinematográficas de la argentina (mucho nombre para nada) acaba de "elegir" a el aura para que nos represente en el oscar. y a iluminados -somos todos amigos- por el fuego para el goya. ambas elecciones eran previsibles. y nada arriesgadas. pero lo peor es que esta academia, que nació como forma de contrarrestar los intereses creados en los sindicatos de la industria local, y cuyos miembros estaban todos contentos y honrados de integrarla, es una fiasco. de las 213 personas miembros sólo votaron 66. o sea, menos de un tercio. al final, nadie se compromete. son unos chotos. y no porque las películas sean buenas o malas, sino porque son poco serios. ni siquiera su "presidenta" norma aleandro estaba para el escrutinio. gente seria.

finalmente llegó el gran día. el jueves 29, a las 21, en el nd ateneo (paraguay 918) tocan los falsos profetas. habrá canciones de tranquila, corazón, algo seguramente de hostal la perla y, por supuesto, de vimos pasar el verano. haré lo posible por llenar una butaca. aunque con f y su tiranía nunca se sabe.

a continuación, la crítica que aparecerá el jueves sobre tiempo de valientes. no la adelanto porque tenga miedo de que me agarre el síndrome bernades (je) aunque, con un jefe histérica (no hay falta de ortografía) como el que tengo, nunca sé si no aparecerá al menos cortada porque no hay espacio, viste. pero sí la mando porque me hago cargo de mis gustos. y la verdad es que la peli me pareció copada. y porque hoy tuve algo de tiempo extra (léase, al pedo). sin más, aquí les va.
Damián Szifrón, confeso amante de las películas de acción estadounidenses, se da el lujo en `Tiempo de valientes' de tener su propio símil fílmico. Eso sí, con un marcado sesgo original y local.
Entretenida, divertida, inteligente y llevadera, `Tiempo de valientes' se nutre de muchos exponentes del género pero el resultado es ciento por ciento `szifronesco'. Es ese estilo que caracterizó a `Los simuladores' y que también se vio en su primera aventura cinematográfica, `El fondo del mar', aunque desde otro ángulo.
En el debe se podría contar que es más `televisiva' de lo deseable (en su factura técnica), pero a diferencia de otros realizadores de pantalla chica que probaron suerte en la grande con bodrios ídem, el contenido se sostiene en la sala a lo largo de los 110 minutos que dura.
Porque aquí sobresale el contenido por sobre la forma (que igualmente está tratada con prolijidad y al detalle). Porque sorprende el guión llevadero, repleto de giros en los que el espectador podrá reconocerse. Pero no son apelaciones demagógicas, simples, sino de cosas pequeñas que hablan bien del ojo observador de Szifrón, capaz de captar objetos, situaciones, palabras, de la crónica diaria y transformarlas en material cinematográfico.
Szifrón presenta a dos personajes centrales: Mariano Silverstein (Diego Peretti en un muy buen trabajo) es psicológo, progre y desconfiado de todo lo que lleva uniforme. Alfredo Díaz (Luis Luque se luce) es policía, algo dado a las arbitrariedades que le da su profesión, pero por principios, honesto.
Una `probation' vinculará a Silverstein con Díaz. Para saldar su deuda judicial, le asignan en terapia a Díaz, que está deprimido porque su mujer lo engaña con otro hombre. El tema es que el oficial está tras la pista de un asesinato doble y, luego de una mala noche, Silverstein terminará acompañándolo en la labor detectivesca, al punto de involucrarse él también en el caso (que trata sobre una corruptela a cargo de nefastos personajes de la Side).
No sirve dar más detalles de la trama. Sólo explicar que durante su desarrollo habrá momentos muy divertidos, algo de suspenso y otro poco de acción (medio `a la argentina', pero acción al fin). Y, también, que contará con un sólido trabajo del resto del equipo actoral.
Tiempo de valientes' es entretenimiento puro. Szifrón no busca trascender desde otro lado. Es un director que, a su manera, se arriesga por una clase de cine muy poco explotado en la filmografía local. Por otra parte, sería una falacia argumentar que busca emular a filmes como `Arma mortal'. Pero el espíritu sí es ese.
La seriedad que envuelve este trabajo lo equipara en voluntad con otros exponentes del cine nacional. Y allí radica su valor como realizador: en querer hacer algo para no estupidizar al espectador. Y eso es siempre bienvenido, sea desde la `corriente' que sea.

no es fonzie, pero rollo tomasi tiene quién lo siga. aunque la nota en cuestión de perfil debería explicar un poquito más lo que él posteó. igual, la foto lo eleva a una categoría de personaje que impresiona. sólo esperemos que sus posts sobre la utopía tengan el mismo predicamento.

fue un día duro. lejos estuvo de los idílicos domingos en las afueras. todo adentro. como el dolor de cabeza de la mañana. y las llagas en la boca de f. y su malestar. y la ida a la guardia y que no, no pasa nada grave pero sí, tiene un virus que le rompe las pelotas. a él, especialmente, y a nosotros. m está enojada conmigo, con razón. no durmió nada. anoche tuvimos un casamiento y terminó muy tarde. no porque estuviéramos con ánimos festivos, pero sí porque todo se atrasó más de la cuenta. cuestión que cinco y pico me estaba tirando en la cama. y m a los 35 minutos tuvo que levantarse a estar con f. a las dos horas se aparece y me lo quiere enchufar. y la saqué carpiendo. más por ignorancia de la situación y por boleo mental que por ponerle los puntos. lejos de mí esa actitud. y ahora soporto su frialdad. que como ocurre cada vez que ella se enoja conmigo es inconmovible. le envidio su capacidad de estar enojada. y quiero que las cosas no sean así. traté de remediarlo a la tarde, fueron seis horas en las que ella durmió y yo estuvo con f como si fuera una rémora. pero una rémora con continuos y sostenidos accesos de llantos. y dolores. y muchos dibujitos y cómo te odio discovery kids y toda tu programación de monstruitos y dinosaurios rosas y esas cosas que lo único que hace es estupidizarme un poco más. niños. porque ahora viene el otro. y un día así multiplicado por dos debe ser mortal. habrá que bancárselo. así que, ya lo dije: un domingo duro, fuerte y molesto. largo como todo domingo de mierda tiene que ser. y con pocas perspectivas de que la noche se tranquilice. buscaré el momento de dormir un poco. nada más.

...only fools rush in, but I can't help falling in love with you...
desde la siempre interesante buenos aires, un saludo a la nueva pareja neoyorquina.

pido, por favor, que a lo largo del día estén atentos a las noticias de nuestro cronista en la gran manzana. el mundo ya no será igual. y no se trata de rita. tampoco de nuestro querido bizcocho. en fin. la vida es corta y como dijo sabiamente el señor televisor, verde que te quiero verde.

existen profesiones que son propensas al escarnio. por ejemplo, es común afirmar que los abogados son una mierda. bueno, conozco a unos cuantos y, en general, resultaron ser buenos tipos. y así con otros oficios. pero a los que nadie nunca acusó de nada y que merecen la más lenta de las torturas en el infierno son los arquitectos. sí, salvando honradas excepciones, los arquitectos son personas que nunca se hacen cargo de nada. si una obra sale mal, fue porque el clima no ayudó. o los materiales fallaron por su propia naturaleza. o los obreros son chotos. pero ellos la culpa nunca la asumen. me mudé al tupper del décimo piso de la calle ugarte desde hace un año y pico y desde entonces estoy lidiando con mi arquitecto para que termine lo que empezó. y ahora, encima, tengo que llamarlo todos los putos días para que arreglé lo que supuestamente arregló. me tiene las bolas llenas y sólo necesito descargarme. la puta que te parió, hermano.

uno lo intenta. quiere estar en regla. pero la burocracia de formularios me marea. no nací para contador y muchos menos para entender a la afip. sé que varios lo verán como un mero trámite, pero para mí, enfrentarme a un aparato que me es ajeno en todo sentido (nunca, creo, recibí nada del estado) me tiene las pelotas llenas. ahora estoy con el tema del reempadronamiento puto y no puedo hacerlo porque el trámite vía internet, que algún capitoste debe haber pensado que era la panacea y por la cual debe haber cobrado miles y miles de pesos, se me traba en un punto y no me deja seguir. ergo, yo me jodo. m se jode. f se jode y quien venga en camino, ídem. a todo esto, la panza hoy no quiso develar el misterio del sexo. la de la ecografía buscaba y buscaba y nada. el feto en su interior se negaba a abrirse de gambas lo que, intuición femenina por dos, decían terca como una mina. y si ya empieza a negarse a abrirse de gambas, supongo que tendré menos dolores de cabeza en su adolescencia de ser cierto. aunque supongo que una mujer no me cambiará los esquemas. live and let live. que m no se entere. y que la afip no me rompa las pelotas que quiero seguir con mi vida. pagaría a cualquiera que me solucionara en un día estos trámites del orto.

ya pasó el tiempo de el aura. está bien, la vio bocha de gente. pero seguramente pasará lo que pasaba cuando salían del cine de ver alguna bosta iraní. sí, qué copado, dirán. y en su fuero interno no verán el momento de meterse en un bar para zamparse una pizza bajo las dicroicas menemistas. y, con la boca llena, tratar de esbozar una idea acerca de la película. mmffmmf, séé... y esas cosas. que, en el fondo, son ganas de evitar hablar de la peli. que sí, es muy buena, ya lo dijimos. que no, no es del gusto popular. eso no es un demérito, pero me apiado de la gente que tiene que garpar creo que once pesos para verla. está bien, banco río te da dos por una, lo mismo que otras promociones de mierda. pero la cuestión es que estuviste dos horas y cuarto en el cine y sacaste poco en conclusión. insisto, sin embargo, en que es una buena peli. pero desconfío de las masas cuando acuden en tropel a ver esta clase de pelis y luego la recomiendan. ok, estoy con la idea fija. y me la banco. habrá que esperar al 29 para ver tiempo de valientes, la nueva de szifrón. muy buena. y muy popular. ja. casi y hasta parezco sirvén. no, por favor. no quiero eso para mí. admito, por otra parte, que estoy en una etapa amarga de mi vida. ya vendrán tiempos mejores. por ahora, un saludo de consuelo a nuestro cronista en niúiorc y decirle que no desista. que la vida es justa con los justos y que ya vendrán tiempos (de valientes) mejores. disfrutá los últimos días de veranito, tomate un moccachino helado (habría que consultar con nuestro cronista en medellín para ver si eso es sacrilegio o no) y no te olvides que estás en un lugar donde un dólar vale un dólar y eso algo de bueno tiene que tener. ¿o acaso no pasaba así en los 90? muchas boludeces y nada en concreto. es más, parece que estoy enojado con bielinsky y que quiero que no le vaya bien a la peli. sí, que la vaya a ver un millón, dos millones de personas. pero, por favor, no digan que es lo mejor que vieron en sus vidas. mi amigo ricardo sabrá comprender su desconcierto. aguante el cine nacional. y a cagar al malba, porqué no. apoyo esa moción. como otra tantas sin sentido. y otras con, pero que son resistidas por el sólo hecho de que hay que resistir a los economistas porque son economistas. y a ponerse en bolas, almorzar tranquilos y a ver si algún día te vemos la cara, que ya sos un misterio pasado de moda y ahora hay que ponerle cuerpo al fantasma. y mejor terminar con mis referencias ocultas que están más a la vista que mi pito en este momento (no es que la esté pasando mal tampoco, al contrario, y de ello pueden atestiguar los vecinos del tupper del décimo piso de la calle ugarte). orson me reclama. y mañana la afip también. todo sea para fumarse un faso contento.

el viernes pasado salí de ver el aura y le comenté a un par de críticos amigos que no me había gustado. cómo te va a gustar si una vez pusiste tal cosa en una película. mientras por enésima vez le dije que yo no tenía la culpa si la gente de dca tergiversaba volantas no escritas por mí para promocionar eventuales porquerías, busqué explicar mi postura: en comparación con nueve reines, bielinsky ahora le había errado. o al menos había cambiado de tal forma que me llevaban no a odiar, pero sí a considerar ecuánimemente que el aura no me había gustado. ¿por qué?, me retrucó, si esto al fin es buen cine nacional. para no perder la batalla de antemano con un hombre ganado por la causa bielinsky-darín, agregué a mi comentario que no había gustado pero reconocía que la peli era buena. buenísima para los cánones locales, adosé. y ahí se quedó tranquilo. sin embargo, en ese momento aún no había podido enhebrar una buena razón para evidenciar mi disgusto con la película, tarea que hoy tuve que apurar sentado en la computadora del diario y finiquitar en media hora. (tenía que hacer también las reseñas de la dignidad de los nadies y los rompebodas.) la cosa es que, puesto a elucubrar una teoría sustentadora de mi opinión, me di cuenta de que debía escribir que la película era buena. muy buena si se quiere. con excelentes actuaciones, eso sí. mérito de bielinsky. porque sino no se entiende cómo brillan acá darín, dolores fonzi y pablo cedrón (dueño de una de las mejores réplicas del film, contundente sin ser estereotipado). también la imagen es digna de mención, opaca, sombría como la atmósfera que todo lo rodea. y así un par de justos elogios más para dar por terminada esa parte del "es una buena película". inmediatamente después, debí ser sincero conmigo y entonces puse que ni en pedo (no en estas palabras, por supuesto) la recomendaría. si alguien me pregunta, che, ¿esta de bielinsky está buena? sí, les digo que sí, pero que a mí no me gustó y que, si esperás otra nueve reinas y sólo eso, mejor quedate en tu casa o andá a ver los rompebodas. punto. y me quedé con eso. pensando que era honesto conmigo. y creo que está bien. que es lo justo. aunque me gustaría que alguien la viera y me diera su opinión sincera. y si no te gusta, andá a ver elsa y fred (que yo por mi parte no tengo la más mínima intención de hacerlo).

apoyo especialmente las mociones 008 y 611 propuestas por lacienciamaldita.blogspot.com (algún día aprenderé a linkear acá). rollo tomasi conducción.

sorry. pero si el sábado a la noche decís que saliste, no podés haber llegado a casa a las 24.15. en serio. m me mira llegar. tiene sueño y estaba tirada en el sillón. qué tal te fue. bien, bárbaro, me divertí, la pasé bien. lo que comimos no estuvo tan bueno, encima nos atienden para el orto (el quejarse de la atención en the embers y decir que no es como era antes habla a las claras de nuestra edad mental). tenés baranda a cerveza. sí, me tomé una y nada más (rebelde soy, hasta ahí, en una mesa plagada de cocas y cocas light). pero me embola llegar a esta hora. ¿qué hora es?, me pregunta entonces. las 24.15 le contesto. y no lo puede creer. y me acuerdo las palabras del vecino del acassusso tenis que se mofaba: una noche que te dan la wild card (está a full con el léxico tenístico) y la aprovechás de esta manera. ja. sí, puede parecer mala. y de repente quise tener veinte años. una más y van... pero hasta ahí, ojo. porque ni bien pasé por libertador y donde estaba parada cero, en olivos, y veo todo el pendejerío deambulando por ahí, la verdad es que me dio fiaca. sí, casi más paro el auto y me bajo y camino entre los pendejos. pero en seguida noté la sinrazón de tal actitud. me une menos a ellos que a mis cófrades del segundo piso de the embers. y encima no la pasaría tan bien. hay una distancia abismal para con estos pendejos. ni siquiera escuchamos la misma música. o nos nos divierte la misma música. ni qué decir de otros temas, sigo prejuzgando (uno de mis deportes preferidos). y sigo por libertador y la verdad es que, a medida que me acerco a casa, tengo más ganas de llegar. de palpar y sentir el tupper del piso diez de la calle ugarte, de disfrutar las mieles de ese limbo que a veces adquier visos de infierno y otras de fiesta celestial. y cuando el domingo a la mañana me levanto y veo que m y f me dejan leer el diario tranquilo, todo parece mejor. eso sí, lástima que era perfil. ya voy a salir un día hasta las ¡4 de la mañana! van a ver.

bueno, al final no fue tan malo como pensaba. fui hasta emi. y estuve con jorge rojas. no sé, la música que hace el pibe me importa menos que piolavago. pero igual lo disimulé. ahhhh, cara de interesado y que sí, realmente me importa lo que pasó con los nocheros... sí, seguro. un par de ajás más y listo, muchas gracias. lo concreto es que, en realidad mi paseo por la multinacional de la música me sirvió para charlar un rato con un tipo copado como el de prensa de ahí. hablamos algo de música -disimulé con algunos temas muy bien, como si fuera en realidad un entendido posta- y comentamos el último disco de los rolling stones y rememoramos cuáles fueron los recitales grandes que más nos gustaron y me sentí bien cuando coincidimos en las mierdas que fueron los últimos de eric clapton y de kiss. también nos preocupamos de que la gente que trae a los rs en febrero parece que no van a dar entradas a la prensa... bueno, tocarán sin mí, que se la banquen. pero ni en pedo pagaría 125 mangos para verlos desde el pasto. o 250 desde la platea. repito, sólo pagaría para pearl jam, pero espero zafarla. porque voy a ir. seguro. supongo que invitaré a nuestro corresponsal en colombia, si es que está acá para esa fecha. el de niúiorc estará ausente con aviso. y mientras tanto se entretiene con su blog y sus, esperemos, más daylies en tp. estoy haciendo un poco de tiempo porque en el realplayer estoy escuchando guero de beck que me lo acabo de bajar (no todos los discos que salen me llegan al diario). me gustan los temas. no tanto como los de coldplay, el grupo que más escucho en el discman y del que x&y cada vez me cae mejor. y el tipo también. buena la nota aparecida este mes en la rollingstone. creo que es la primera edición del año que de verdad me dan ganas de leer de punta a punta (¿será que nadie del staff permanente escribió las notas de las que hablo?). me la reservo para hacerlo en el colectivo, de día, con tiempo y buena luz. a la de coldplay sumé la de norman mailer. ambas, 8 puntos. la de cemento, 5, porque promete más de lo que cumple. me gustaría que la de litto nebbia sea divertida y que la dave grohl también. y bueno, volviendo a eso de hacer tiempo es porque a continuación de guero bajé muchas canciones de juana molina. quizás fue verla hoy en lo de mirtha (la tele, en el diario, es música de fondo; aunque a la vieja de mierda no la soporte). y ahora me vienen los temas de esta mina y me gustaría saber si de verdad está inflada o no. vamos a ver... y basta por hoy.

estoy así, a un pasito nomás, de embolarme completamente. no sé si es la telefónica que tengo que hacer en media hora. o la entrevista a jorge rojas esta tarde. pero internet tiene mucho que ver. estoy medio hasta las pelotas con algunas cosas. y quizás dentro de poco explote. y mande todo a cagar. sería lo más lógico.

sí, cambiemos de registro y abreviemos. la buena noticia del día es que en menos de un mes tendré un especie de bono capaz de calmar mis ánimos consumistas, por más que tenga todo ese dinero comprometido en diversos arreglos caseros. pero, ¿qué me detiene a cambiar la pantalla que tengo por una flat de lcd? nada, a excepción de la conciencia. ay, conciencia, ¿por qué mierda te arrastro? y ahora me gustaría estar internado un mes en medellín, ciudad calixtoafín según el cronista instalado allá, cuya frase de cabecera ya no será más "la chatura de buenos aires" sino "la chatura del café de buenos aires".

mañana le haré una visita sorpresa y, oh sorpresa, se sorprenderá. y caminará hasta mí y me estrechará la mano, entre sonrisa irónica, incrédula y una más que no recuerdo. jajajaja, cómo andás y un café en la esquina si tiene bar ahí. sino, hasta luego, después seguimos. y sí, hasta la vista. avisá cualquier cosa. ocá, ocá. see you. suena a plan perfecto pero temo arruinarlo. siempre pienso en demasía estos encuentros. pero la premeditación poco ayuda, ya que nada impide que luego haga otra cosa. y termine solo caminando por plaza san martín, buscando un papel en el suelo con una flecha que me indique la dirección correcta. al menos una equis para saber si abajo hay tesoro o no. la casa tiene necesidades. y yo ni te cuento. a veces necesito gritar y no lo hago. aunque el otro día me descargué. grité como cinco, seis veces, a viva voz, a flor de cuello a etcétera en decibeles. y tomé aire. di una vuelta y volví como perro fiel temeroso del palo del amo castigador. y estaba lejos de plaza san martín y de la localidad homónima también. siempre parece que estoy lejos, en realidad. aunque esté acá al lado, tan cerca que te puedo tocar. pero no lo hago. como no hago otras cientos de miles de cosas. de las buenas y de las malas. ya habrá tiempo para probar de todo y después te cuento. ahora tengo otras cosas en la cabeza. más de las que me recomendaría el médico. o el psicólogo que me atendió por última vez en... ni me acuerdo el año. sólo sé que era en el hospital de san isidro. buen tipo el hombre. no necesitaba que yo hablara. quizás para él era más fácil: cobraba por mirar cómo un pendejo miraba el techo. y así en este país se hace rico cualquiera. un empujoncito, entonces y a la vida hermano. aunque creo que le faltó una cocción. o sea, a mí. pero ese es otro cantar y no hay que andar confesándose acá. y faltan menos horas para mañana y ya me estoy arrepintiendo del plan. me da fiaca. ya veremos. y entonces dejo fluir la conciencia y ahora se me ocurre que yo debería escribir "la canción argentina". ¿te imaginás? ¿en qué ritmo lo haría? ni idea. estaría bueno, cool, jeje, butthead... y mirar tele hasta morirme... jejejeje... beavis... por favor, basta. ya sé lo que necesito: una idea rectora que al menos guíe las palabras que escribo acá. que tengan un mínimo de coherencia para no tentarme en borrar todo y dejar pasar tres días más sin un post, sin este acto sin sentido que sin embargo alimenta mi ego de cierta forma. y en ese aspecto estoy famélico... ajjjj, ya me parezco a una llorona que conozco y que no quiero emular en lo más mínimo. up, tinelli in my head, pum para arriba, hasta el 13 y to the infinity and beyond! pero no mañana, porque para mañana tengo preparada una sorpresa que no será tal porque está anunciada y ya me da paja hacerla o sea que la sorpresa pasa a ser no hacer la sorpresa y a esta altura la palabra sorpresa tiene una resonancia tan gay en mi cabeza que mejor alejarla hasta otro momento y pensar en una palabra que la pueda sustituir sin tener que borrar todo lo escrito anteriormente para que sepan que en verdad nunca pensé en la palabra sorpresa cuando me dispuse a pensar en una sorpresa que no será tal ya que en mi mente se llama de otra manera. capisci? entonces quedamos en que si mañana me ves no será una sorpresa y por favor no me la nombres porque me voy a poner mal. y cuando salga, al nover ninguna flecha me voy a deprimir un poquito al menos. ahhhhhhhh... ése sí es un tema. pero para otro momento: la depresión. cómo me divertía estar deprimido. y sí, la palabra es divertirme, porque si bien mi exterior daba la imagen de tipo totalmente hosco y retraído, por adentro me gustaba ese look loser postadolescente. qué vital para mí fue, entonces, la adolescencia tardía. ¿se lo tendré que agradacer al cadáver del cura del colegio? no creo. porque nunca, supongo, se propuso cagarme la vida. y ahora sí estoy hasta el cuello de boludeces. el tupper del piso diez de la calle ugarte huele a mierda y no es dinamarca. ja, ya quisiera, si solo mi abuelo hubiera hecho el trámite a tiempo, ahora estaría tomando una cerveza fría en la península de jutlandia... my fatherland... desde orson, llamando a la tierra, me despido, no sin antes dejarles esta reflexión: es más fácil suministrar un remedio cuando el niño está dormido que cuando está despierto. posta.

a veces te pasa. sin que te des cuenta, los días transcurren y vos encima de ellos. como si te quedaras dormido en el subte y te pasás de tu estación. aunque eso es imposible conmigo porque siempre que viajo lo hago de punta a punta. pero no importa, es la idea. entonces te diste cuenta de que hubo una semana más en tu vida y que nada provochoso sacaste de eso. sí, algo de sexo. y buen cine. y un disco que tenías ganas de volver a escuchar. pero no mucho más. las gratificaciones típicas de padre primerizo en espera del segundo. y las sonrisas repartidas por doquier cuando estás en familia (política). y la pasás bien, no hay porqué engañarse, pero sabés que podrías haber hecho algo mejor. podrías haber aumentado el contacto con tus contactos clásicos. y no lo hiciste. porque estabas metido en ese subte caluroso que te atonta la cabeza, te duerme y te quedás sin bajar en tu parada. bueno, no el subte repito. pero sí me pasaba de adolescente, volviendo a don torcuato en el 203 y en vez de quedarme en balbastro para luego agarrar burgos si es que los perros sueltos no te hacían dar un rodeo, me quedaba dormido y me despertaba siempre en lugares incómodos, como en el medio de campo de mayo. y yo, boludo, decía parada chofer en vez de seguir hasta la próxima zona civilizada. si no me violaron por esa época fue porque la que se hizo cenizas y navega por el mar de pinamar no quería y tenía un arreglo especial... ahora que pienso, quizás se martirizó por mí y ahora habría que tratar de canonizarla. no fue poco lo que hizo en su cristiana vida. como soportar a los cuatro hijos que tuvo y a su marido. y el hecho de que no me hayan violado en campo de mayo -posta, nunca me violaron- quizás sea el milagro necesario para canonizarla. debo tener por ahí alguna estampita para rezarle. el día que vuelva a creer en los santos. la cuestión, entonces, que yo estaba ahí y tenía que esperar al 203 de vuelta. y como siempre que estuve solo en una parada, los colectivos tardaban, llegaba a casa mucho tiempos después (y más si las jaurías torcuatenses me hostigaban). pero en esa época no me daba cuenta de nada. no me importaba toda esa demora. todas esas horas consumidas en transportes públicos. era tan natural para mí que lo tenía incorporado. y así, desde que me tomaba el bondi a la altura de la estación san isidro y al rato venía el 203 y nunca el más conveniente (est. virreyes) sino el que decía canal (o sea que se iba hasta san fernando) hasta llegar a casa podía pasar más de hora y media. y en el trayecto, cuando no me quedaba dormido (que utilizaba para recuperar fuerzas), me cruzaba con todo tipo de personajes, desde los pibes que recorrían centenario de punta a punta (cómo envidiaba a esos que se bajaban enseguida) hasta los que salían de las bailantas de punta en blanco. posta, punta en blanco, desde la camisa hasta los zapatos. borrachos endémicos y minitas de toda raza y color. y esos viajes me los comía porque estaba harto de hacer la combineta costera hasta márquez y panamericana y luego 203 (panam, obviamente) o 15 (que implicaba bajarme en el cruce de ituzaingó (no la localidad) y luego cruzar la panamericana hasta casa. esto sí que era peligroso y si nunca me atropellaron se lo debo, nuevamente, a la próxima estampita (por lo que se comprobaría su segundo miracolo y a prenderle velas entonces). eso sí, era la vieja panamericana, esa de dos carriles por mano, porque con la de ahora es imposible y se hizo después de que me mudé). ahora que la recuerdo era muy jodida. porque no se veía un carajo y los autos siempre pasaban a los pedos. y yo cruzando, a veces borracho por ahí. en el medio de la nada. y me imagino una muerte sórdida como pocas, revoleado por el aire. y nada. porque no pasó. pero está bueno que eso se me venga a la memoria: toda esa etapa de adolescente en don torcuato. donde sí me movía por impulsos: salir de ahí los viernes a la noche y volver a casa cuándo y cómo fuese. fueron años en los que en gran parte hacía base en lo de amigos, que me asilaban a veces desde el viernes hasta el domingo a la mañana (hasta que me volví en colectivo de madrugada) porque sí o sí el domingo en casa para el almuerzo familiar, que no era otra cosa que interrumpir el sueño eterno de domingo para comer algo y volver a mis cosas. y esos asilos eran divertidos, porque llegabas a formar nuevas familias. como la de h. o la de idelc. linda adolescencia. lo único malo fue la blancura que la carecterizó (you what i mean). nene de pecho chupándose el dedo hasta tarde. ¡por convicción! y bueno, de todo hay en la viña del señor. y entonces, al conocer el otro lado, experimenté lo que sería una segunda adolescencia: o sea, hasta los 25 más o menos viví lo que tendría que haber sido mi adolescencia y no lo hice. no me arrepiente. nada más que empecé tarde. y no me refiero únicamente a ese tema, que convertiría la conversación en algo demasiado trivial (cuando quiero ser profundo, seguro, je) sino en todo lo demás y estuvo bien que así fuese. la pasé bien, entonces. y dale con los entonces. me encantan los entonces. porque entonces lo conecto con el fin de semana, que fue todo eso y nada al mismo tiempo, dejándome llevar y extrañando un poco ese destino manifiesto que tenía, por entonces, de salir y salir y volver a casa tarde. y ya no entiendo más nada porque no sé si esto es lo que quiero poner pero es lo que me sale a esta hora. que en vez de estar escribiendo tendría que estar suministrando a f su antibiótico de las 12. porque tiene laringitis subglótica, mal que me llevó el sábado del partido de mierda de argentina-paraguay a recalar, él y yo solos, en la guardia de la sagrada familia (¿chiste interno de las cenizas canonizadas?) y limpiar el gómbito que se echó en la guardia y volver a casa una hora y media después para enterarme de que el muerto de riquelme sigue siendo un muerto y que los otros diez poco hicieron para revertir un uno a cero del orto. ¿o es que escribo todo esto porque tengo cargo de conciencia por no haber escrito nada significativo en los últimos días? tal vez, de todo hay en la viña del señor de los anillos, de estos dos anillos que me unen a m hasta que se de cuenta y me deje plantado por zoquete. por lo menos ya no tengo que cortar el pasto del jardín de don torcuato. que era enorme y me llevaba un buen rato.