calixto

y un día volvimos al tupper del décimo piso de la calle ugarte. juntamos las valijas, nos despedimos del perro, la pileta, la mucama, las niñas prestadas y sus padres viajeros, y volvimos a nuestra casa. esa que estuvo cerrada por 15 días. y volvimos a la normalidad. y entendé normalidad como lo que quieras que sea. ¿qué cosas voy a extrañar? (porque en dos semanas uno puede crear hábitos nocivos para su realidad...) voy a extrañar el auto. un golf blanco, modelo 2000 que usaba para ir al diario todos los días. ok, era un presupuesto que alteraba el ya magro dispenso mensual de este laburante. pero qué placer atravesar la ciudad a bordo del bólido, escuchando música. y ahora me tengo que movilizar como cualquier cristiano, en bondi o subte. y hoy a la mañana no sabía si llevarme un libro o un disco. y opté por lo primero. no es gran cosa, pero zafa esos tiempos muertos que tanto odia hernanii. tan desacomodado estoy que casi más me prendo un cigarrillo adentro del abasto y por suerte no lo hice, porque vi cómo, de mala manera, un guardia de seguridad se regodeaba en su autoridad de gorra y cachiporra privadas para espetarle a otro ser humano su irresponsabilidad por ese gesto vicioso ahora denostado por la sociedad y condenado por la legislatura porteña. y pienso en esa imagen y veo a lola riéndose. no lo hagas conmigo que te mato. y ni rollo te va a defender, ya que tiene múltiples causas abiertas (y eso que defiende mi derecho a morir de cáncer).
volviendo al título, no sé, veo el calendario y son días que no recuperaré. y ahora me enfrento a un terror peor que el del escritor y su página en blanco: el del blogger sin nada que postear. para un blogger comprometido, significaría la hora del abandono. pero como no le debo nada a nadie, aquí seguiré hasta que realmente me aburra. por suerte, hay mucho para hablar.
ejemplo i: sí, realmente festejé la derrota de españa ante suecia. y algo que ensanchó más esa sonrisa fue ver cómo mi odiado picapiedra puyol erró un gol y se rompió el alma para volver a su área y pasó de largo sin evitar el segundo gol de contraataque sueco. y sí, festejo una victoria de los que nos echaron de japón-corea 2002. y qué. gallegos putos; ya lo dije, los odio sólo en deportes de equipos y en nadal y en alonso de quien, por otra parte, lamenté su victoria en japón haciendo que la despedida de schumi sea más dolorosa aún.
ejemplo ii: todavía sigo con los ecos de callejeros en córdoba. hoy leí el comentario ambiguo de juan ortelli en la rolling stone. estos pibes dan para un tratado sobre la mediocridad, la lavada de manos argenta y un síndrome de inmadurez enfermiza. putos del orto que insisten en que lo suyo es lo de la guitarrita. no, flaco, fuiste el anfitrión del apocalipsis chabonero. los invitaste a todos al banquete de severo arcángelo y después querés salir sin manchas de semejante desparramo.
ejemplo iii: recomiendo, con todo lo que ello implica, mirar el viento que acaricia el prado. de entre todas las críticas que leí, creo que esta explica mejor que ninguna mi entusiasmo.
ejemplo iv: me chupan un huevo las peleas de k, bergoglio, marcó, rovira, piña, etcétera, etcétera.
ejemplo v: que los almacenes de barrio son caros por naturaleza, nadie lo duda. pero no estaba preparado para los almacenes cercanos a los barrios cerrados. hacen del sobreprecio un estilo de vida. y lo peor es que veía gente llenando el changuito. montoya, mandame un inspector a rincón de milberg, por favor.
ejemplo vi: está copado enterarse de cómo va el partido river-boca por el sonido que llega hasta el tupper del décimo piso de la calle ugarte desde el monumental.
ejemplo vii: ya que hablo de la cancha de river, está bueno también saber que en breve estaré por ahí para escuchar a robbie williams. y sí, es una de esas cosas que mejor no entrar en detalles. pero el tipo me cabe. y la granata también.
ejemplo viii: está bueno que el hecho de casarte y tener hijos te permita festejar el día de la madre, algo que hasta no hace poco tenías vedado (un golpe bajo tenía que tener, che).
ejemplo ix: volvamos al tema non smoking area. te juro que hace rato vengo diciendo que tengo ganas de dejar de fumar. fumo mucho, bastante. y es hora de que cambie. pero que esa necesidad de sentirse sano se emparente con el hecho de que, a partir de ahora, ya no puedo fumar donde se me antoja, actúa como efecto búmerang. ahora quiero fumar hasta que vuelvan a dejar fumar en lugares cerrados.
ejemplo x: comprarse un dvd (reproductor, digo) está bueno. y más si lo inaugurás viendo lord of war (che, no puede ser que la mejor crítica que encuentre sea ésta, del mismo pibe; creo que hay que seguirle su carrera).
ejemplo xi: adquirí un vicio culposo a más no poder: escuchar las sentencias de bailando y cantando por sendos sueños. son una mierda, lo sé. y no soporto el concurso, lo que representa ni a tinelli. pero la pelea de medio pelo entre gente ridícula es graciosa.
ejemplo xii: ¿conté alguna vez sobre mis planes de contratar a un sicario colombiano para dar muerte de forma lenta y dolorosa a una persona detestable que, por caso, puede llamarse tranquilamente mirtha legrand? no me digan que no es una buena idea...
ejemplo xiii: sigo pensando que limón y sal, el disco de julieta vanegas, está en el top five de los mejores disco del año y, si me apurás, de la década.
ejemplo xiv: tá bien, pensás que estoy tirando ejemplos al voleo. estás en tu derecho. puede ser cierto. o no. sigue la flecha.
ejemplo xv: quince días o más sin postear y quince ejemplos para seguir posteando en el futuro. yeap, sigo teniendo ganas.
see ya later...